Casa Útera, defensora de los derechos sexuales y reproductivos, destaca posibles incumplimientos de la sentencia C-055 de 2022 en Risaralda. Esta sentencia permite la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 24, pero casos recientes señalan incidentes de violencia obstétrica en centros médicos.
Identificando Problemas: Violencia Obstétrica en Detalle
Durante acompañamientos de abortos, se han detectado demoras injustificadas y lenguaje despectivo por parte del personal de salud en Risaralda. Laura Muñoz, cofundadora de Casa Útera, comparte detalles impactantes, incluyendo situaciones donde la atención urgente y prioritaria se posterga, y casos de procedimientos que no siguen las recomendaciones de la OMS.
Raíces del Problema: Falta de Conocimiento y Capacitación
Muñoz atribuye estos problemas a la escasa capacitación del médico personal en Risaralda. En 2020, solo 140 profesionales recibieron instrucción en dos ocasiones, lo que puede contribuir a errores en procedimientos y omisiones en la atención.
Llamado a la Acción: Prevenir la Violencia Obstétrica
Casa Útera hace un llamado urgente a las instituciones de salud, tanto públicas como privadas, para implementar planes de capacitación continua. Esto, alineado con las directrices de la OMS, busca garantizar el cumplimiento de la ley sin obstáculos para la interrupción del embarazo. La prevención de más casos de violencia obstétrica es esencial para el bienestar físico y mental de las mujeres en Risaralda.